Quizás, tal vez, a lo mejor...pero y si no fuese finalmente?
Nada en el mundo hay que pueda aliviar la pena más y mejor que un abrazo a tiempo.
Nada, de nada!
Y si a la postre no buscas, y esperas sentada a que llegue ese momento, puedes perecer en la espera.
Quizás no encontré porque no busqué.
Tal vez no haya nada más que esperar.
A lo mejor...o a lo peor, no lo necesito de verdad, y por eso no lo tengo.
En fin, las mañanas tristes se apoderan de ti y se convierten en un mal necesario.Te dura tooooodo el día, y agotada deseas que muera la jornada, y que en la noche callada se encierre tu deseo...otra vez más.
Nada hay en el mundo que pueda aliviar la pena...más y mejor que un abrazo a tiempo, y ese abrazo no es tuyo, sino de otro Ser. Ese Ser no está dispuesto, porque está envenenado de orgullo, pero yo sigo esperando. Quizás mañana sea tarde, y perderemos los dos, pero mientras tanto sufro yo.
Mañana se hará el día, y desnuda mi mirada se posará en un horizonte que estoy segura jamás alcanzaré.
Yo sé que está, pero no voy a caminar hacia él, ese horizonte estará mientras yo me quede inerte, si me muevo se desvanecerá, y entonces sí que jamás lo alcanzaré.
Hoy, llevo a cuestas la ternura de unas manos que me protegieron en momentos así, la mirada que me ayudaba a mirar de nuevo a otro lugar, la pasión de unas palabras que me alentaban.
Hoy las llevo a cuestas y es por ello que no voy a levantarme, ya no están y no volverán. Por todo eso y por más, no crea nadie que podrá decidir por mí, YO ME LEVANTO, pero cuando yo lo quiera, y mientras...HOY TE TOCA ESPERAR A TI.
( María)
Preciosos sentimientos y maravillosamente descritos. Y, ¿tú dices que eres más burra que un arao? Tú lo que eres es un ser humano maravilloso y yo estoy feliz por haberte encontrado.
ResponEliminaGracias Rosama, pero no es más que aquéllo que aflora en un momento determinado. Nada tiene continuidad, es lo que ves...no hay más.
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